Con mucho pesar recibimos este jueves 06 de mayo la noticia del fallecimiento de don Humberto Maturana, Premio Nacional de Ciencias en 1994, quien fue considerado uno de los intelectuales más influyentes del país.
Nacido en Santiago el 14 de septiembre de 1928, Maturana estudió en el Liceo Manuel de Salas, ingresando en 1950 a la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile. Estudios posteriores le permitieron obtener la especialización en anatomía y neurofisiología, obteniendo en 1958 un Doctorado de Biología de la Universidad de Harvard.
Dentro de sus múltiples aportes a la ciencia, Maturana destacó por ser el autor de la teoría de la autopoiesis, concepto que desarrolló junto al neurobiólogo Francisco Varela y que comenzó a ser publicada en una serie de trabajos desde fines de los años 60. Se trata de una definición de vida que designa la cualidad de un sistema capaz de reproducirse y mantenerse por sí mismo.
“La pregunta básica que me hice fue qué es lo vivo y qué muere, o qué tiene que estar pasando en su interioridad en un ente para que yo, mirándolo desde afuera, pueda decir que es un ser vivo”, explicó en 2019 el propio Maturana a BBC Mundo.
Entre sus múltiples actividades académicas, su paso por Universidad SEK marcó a una generación de docentes y alumnos de la carrera de Psicología. Así lo recuerda nuestra Rectora Eva Flandes, quien tuvo la oportunidad de conocerlo en nuestro antiguo campus de Peñalolén. “Hoy nos ha dejado un grande, grande no solo por sus conocimientos y aportes a la ciencia y a la filosofía sino por su grandeza como ser humano. Tuve el privilegio de conocerlo en la década del 2000 cuando fue profesor de la carrera de Psicología de la Universidad y lo que más me impresionó de él, además de su sabiduría, era su sencillez, su humildad para transmitir sus conocimientos y darse el tiempo de conversar con los estudiantes, ya fueran de su cátedra o cualquiera que se le acercara, en ese entonces en los jardines del campus Parque Arrieta. Esa sencillez y cercanía dejó una profunda huella en todos nosotros y en muchas generaciones de estudiantes que hoy son grandes profesionales y que le deben mucho a sus enseñanzas de vida”, comentó nuestra Rectora.
Como comunidad universitaria nos sumamos a las diversas muestras de pesar y cariño hacia su familia por su partida. Hoy nos deja una mente brillante, sin duda, su legado intelectual y su inolvidable calidad humana trascenderá a varias generaciones.
Fuente: chilevisionnoticas.cl