Florencia Schulz, Psicóloga de USEK

Fue en el año 1997 cuando Florencia Schulz decidió estudiar Psicología en Universidad SEK. Ese año ingresó a estudiar la carrera en el campus Parque Arrieta, espacio que por esos años albergaba a todas las carreras que impartía nuestra Universidad, y que ya en esa época era Monumento Histórico Nacional.

La decisión de estudiar en aquel entorno no fue casual y tuvo mucho que ver con la historia de vida de Florencia, quien es egresada del Colegio Internacional SEK de Santiago y desde siempre vivió en la precordillera santiaguina, siendo muy apegada con la naturaleza. Cuando cursaba IV° medio conoció el campus gracias a las clases que realizaban una vez por semana en la Universidad, instancia que la llevó a querer extender su paso por ahí más allá del colegio. “Cuando conocí la SEK me maravillé con el Parque, era un privilegio poder estudiar ahí. Pensar en postular a una universidad en el centro de Santiago no era opción para mí. Además, mi hermano estudiaba Derecho en la SEK, entonces ya tenía una conexión”, comenta.

Desde siempre supo que su vocación iba por alguna carrera humanista, que le permitiera estar en contacto con los seres humanos. Psicología estaba entre las carreras que le interesaban, pero también pensó en ser Educadora de Párvulos. “Me decidí por la Psicología porque si hago un recuento hacia atrás y me encuentro con cosas que escribí, siempre me proyectaba en el futuro como psicóloga, pero en el área clínica. Siempre está esta idea soñadora de lo clínico hasta que uno se da cuenta que hay muchas áreas por descubrir”, cuenta.

La carrera de Psicología es una de las más antiguas de Universidad SEK y ya por esos años contaba con un cuerpo académico de excelencia y de reconocimiento nacional que perdura hasta hoy. “Llegué a la SEK y me encantó, comencé a descubrir que los profesores eran personas con mucha experiencia. Tenía una malla curricular súper amplia que te mostraba todas las posibilidades del campo laboral de la Psicología, entonces podías acceder y conocer diferentes alternativas para elegir en qué especializarte”. 

Fue en esa exploración de la carrera donde Florencia fue ayudante de Psicología Escolar y Educacional en la USEK y a partir de esa experiencia es que decidió especializarse como psicóloga educacional cursando un Diplomado en el área dos años después de titularse. 

Casi recién egresada entró a trabajar al Colegio Internacional SEK, donde tuvo la oportunidad de ejercer tempranamente en el ámbito educacional. “Yo he estado toda mi vida relacionada con el Colegio SEK. Nosotros somos 4 hermanos y todos estuvimos ahí. Cuando yo me titulé y como la Universidad está muy ligada al colegio, me encontré con un profesor que me dijo que buscaban una psicóloga y qué mejor que alguien que conociera la Institución. Así fue como postulé y quedé”, cuenta. 

Tras 4 años de ejercer como Coordinadora del Departamento de Psicología en “su colegio”, la necesidad de crecimiento profesional la llevó a buscar nuevos caminos. Si bien fue una renuncia que califica como “dolorosa” por lo que significaba para ella el Colegio SEK, sabía que ese era el camino correcto para ganar experiencia profesional.  

Fue así como Florencia inició un camino de exploración profesional, donde descubrió una veta comercial que le permitía tener un perfil muy específico para alguien proveniente del área de las humanidades. Pasó por diferentes empresas, donde fue Product Manager, Jefa de Ventas y Encargada de RR.HH., hasta que su perfil encajó para entrar a trabajar a Kidzania. “Un amigo que era el encargado de contenidos de Kidzania buscaba una persona que supiera de educación y de ventas. Estuve ahí casi 8 años y fue una experiencia maravillosa. Kidzania es un lugar donde los niños aprenden jugando y fue un proyecto muy lindo donde trabajé con las mallas curriculares de las actividades para que tuvieran un objetivo pedagógico y los niños efectivamente aprendieran”, recuerda.

Tras seguir ejerciendo en el área comercial, su espíritu inquieto y motivación innata la llevaron también a crear su propia empresa de Capacitación para organizaciones, donde combinaba las salidas al aire libre con asesorías en comunicación y trabajo en equipo. Esto la acercó a su profesión, pero sentía que estaba en deuda con ella misma y buscó la manera de volver a estudiar y capacitarse en un área de desarrollo de la Psicología. “Me capacité en Coach Ontológico, que es maravilloso. El Coach tiene que ver con el ser, ver a la persona en distintos aspectos, por ejemplo, la comunicación, el cuerpo, el alma, los juicios que nos armamos desde chiquititos. Es distinto a la Psicología en el sentido de que con el coach trabajas objetivos pequeños, es más a corto plazo”, explica.

La llegada de la pandemia y el aumento de las consultas por salud mental fue la oportunidad para volver a trabajar en el ámbito de la educación, donde realizó apoyo en planes de bienestar con profesores en colegios que lo requerían. Fue en ese recorrido y después de casi 15 años desde que decidió partir, que la contactaron nuevamente del Colegio Internacional SEK para realizar un reemplazo donde tras dos meses, la contrataron.  “Fue bien bonito mi regreso al SEK. Realicé el reemplazo y luego me ofrecieron quedarme, no lo pensé dos veces. Esta es mi casa y le tengo mucho cariño al colegio”. 

Hoy trabaja como Psicóloga en pre-escolar y primer ciclo y, al igual que ella, sus hijos son parte de la comunidad escolar del Colegio SEK. “Si tuviera que volver a elegir, estudiaría nuevamente Psicología, es lo mío totalmente. Siempre he pensado que a los 17 o 18 años es muy difícil tomar la decisión de qué carrera estudiar para el resto de tu vida. Pero sí creo que los seres humanos tenemos la capacidad de reinventarnos y hay que confiar en eso. Uno toma una decisión y si hay que dar la vuelta larga, hay que hacerlo. Y sí, la Psicología es lo mío”, concluye.